La fertilidad es un tema recurrente en las conversaciones de cualquier pareja cuando se toma la decisión de crear una familia. Sin embargo, en este momento es fácil caer en equivocaciones basadas en consejos que no sostiene ningún estudio científico. Por este motivo, un grupo de expertos en fertilidad desmontan las leyendas urbanas más habituales en torno al proceso para lograr el embarazo.
Según explica el equipo médico de Instituto Bernabeu, entre los falsos mitos presentes en el imaginario colectivo destacan algunos como que los anticonceptivos afectan a la posibilidad de quedarse embarazada. Gran parte de los comentarios u opiniones que dan forma a estos mitos acaban calando en nuestra sociedad y, sin embargo, no tienen ningún respaldo científico.
Mitos más comunes sobre quedarse embarazada
1. Si te relajas te quedas embarazada. Aunque es cierto que el estrés no es buen compañero, no es un motivo de infertilidad. No existe ningún estudio que confirme la relación entre el estrés de una persona y su infertilidad. Si bien es evidente que el estrés implica algunos cambios hormonales, los expertos subrayan que tendría que producirse una gran alteración hormonal causada por el estrés como para que afectara al proceso de quedarse embarazada. “Hay mujeres que creen que la ansiedad por no lograr quedarse embarazada reduce sus opciones futuras, pero no es del todo correcto porque no hay una relación directa demostrada científicamente”, subrayan los expertos de Instituto Bernabeu.
2. Si ya tienes uno te vas a quedar embarazada sin problema. Un clásico de los mitos. Acostumbrados a ver a parejas con dos hijos o familias numerosas, la cultura popular erra ya que los problemas de fertilidad pueden emerger tras el primer parto y se pueden vincular a muy diversos motivos. “Esta problemática recibe el nombre de infertilidad secundaria y afecta a un 10,5% de las mujeres (según los datos de la OMS), lo que representa un 8,5% más que la primaria. Sin embargo, en la mayoría de los casos existen técnicas para facilitar este segundo embarazo”, explican desde IB.
Además, cada vez vemos en más ocasiones este tipo de infertilidad ya que las edades de concepción del primer hijo cada vez son más tardías, lo que dificulta en muchas ocasiones las siguientes gestaciones.
3. Los 40 son los nuevos 30. Incorrecto. A pesar de que la esperanza de vida no deja de crecer en los países occidentales, los límites de la fertilidad los marca la naturaleza. La reserva ovárica restante tiene una importancia capital en la concepción, pero disminuye de forma natural a medida que una mujer cumple años, por lo que las probabilidades de quedarse embarazada se van reduciendo. “Concretamente, a partir de los 30 la bajada de las posibilidades se pronuncia y entra en caída libre al sobrepasar los 35 años. Esto no quiere decir que a los 40 años no sea posible un embarazo, pero será más probable que necesiten un seguimiento en clínicas de fertilidad”, destacan los expertos.
4. Estás sana, tienes la regla todos los meses, no vas a tener problemas. La realidad es que la biología de una mujer en cuestiones reproductivas es la misma que hace miles de años. Los problemas que se puede encontrar una mujer a la hora de concebir son muy diversos y a menudo puede resultar frustrante si no se localiza el origen del impedimento. Tener la regla no implica contar con ovocitos de la calidad suficiente para tener un embarazo viable o que el útero esté sano o puedas tener otros problemas que causen esterilidad.
5. La infértil eres tú. Se tiende a achacar los problemas de fertilidad a la mujer, pero ya sabemos que los problemas de fertilidad también se deben al hombre. Más concretamente, un 30% de las causas de infertilidad son atribuibles a las mujeres, un 30% a los hombres, un 30% mixtas y el restante 10% es por causas desconocidas.
6. Hay posturas sexuales con las que lograr el embarazo. Es falso, dado que la postura en la que se tiene la relación sexual no implica en el proceso de que los espermatozoides lleguen al óvulo y lo fecunden con éxito.
7. Si tienes cáncer no podrás ser madre. Otro mito incierto. Evidentemente, la mayoría de los tratamientos de mujeres con cáncer pueden resultar agresivos y afectar a su fertilidad. En cualquier caso, hoy por hoy existen posibilidades de ser madre gracias a la ciencia. Antes de la quimioterapia, las pacientes pueden someterse a una criopreservación de ovocitos para poder tomar la decisión de concebir superado el tratamiento. “En estos casos siempre aconsejamos acudir a clínicas de fertilidad para que un experto evalúe cada caso particularmente y determine el tratamiento más eficaz para facilitar el embarazo”, explican desde Instituto Bernabeu.
8. Donar óvulos o tomar anticonceptivos te dificultará lograr el embarazo. También es falso, pues no hay ninguna vinculación entre tomar anticonceptivos y una afectación a la fertilidad de la mujer en ocasiones posteriores. “Cerca del 35% de mujeres en edad reproductiva los utiliza, y hay constancia de que la probabilidad de embarazo en mujeres que toman estos anticonceptivos es la misma que las que nunca los toman. Solo afecta durante el uso de los mismos, no pasado el tiempo”. Por otro lado, ser donante de óvulos no limita las posibilidades a la mujer donante de tener un embarazo a futuro. “Muchas mujeres jóvenes deciden donar óvulos para ayudar a otras mujeres que no pueden ser madres y ello no implica reducir sus propias opciones de lograr un embarazo. Los óvulos que donas en un ciclo concreto no quedarían en tu reserva en ningún caso, se perderían, por lo que tus opciones seguirán siendo las mismas”, detallan los expertos.
9. Hay formas de favorecer tener un niño y una niña. Este mito está muy extendido y es falso, pues no hay ninguna manera de determinar el sexo del bebé en el momento de la concepción. La falsa teoría se basa en que es más fácil tener un niño cuando se concibe cerca de la ovulación, pues el espermatozoide con cromosoma Y es más ligero y puede llegar antes al óvulo. Sin embargo, desde Instituto Bernabeu subrayan que no hay ninguna base científica. Por otro lado, los expertos recuerdan que mediante técnicas de reproducción asistida tampoco es posible que se pueda seleccionar, a petición de los padres, el género del futuro bebé “sólo se puede contemplar la selección de género por razones médicas cuando el género implique enfermedades graves del futuro bebé, de acuerdo a la legislación española”.
10. Fumar antes del embarazo no afecta. Ser fumador y fumador pasivo sí que afecta a las opciones de quedarse embarazada. Entre otras cosas, “fumar antes del embarazo puede acarrear una caída de la calidad ovocitaria, así como mayor estrés oxidativo en el ovario y una menor receptividad uterina”. También afecta a la contractilidad de las trompas de Falopio, lo que dificulta las opciones de quedarse embarazada.
La conclusión es sencilla: la sociedad está plagada de mitos y bulos que a menudo se confunden con la realidad y conducen a falsas interpretaciones del proceso de concepción. Las redes sociales, por ejemplo, y las opiniones de gente no experta no deben ser tomadas como referencia. Acudir a especialistas si no logramos un embarazo de forma natural es el camino correcto para conseguirlo.