Psicología

Psicólogos en Palma de Mallorca y la importancia de su labor

 

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A lo largo de la vida se van aprendiendo y desarrollando muchas cosas. El trabajo, el ritmo de vida, los horarios de descanso cambiantes, el estrés y un sinfín de situaciones variables que condicionan la rutina diaria, pueden acabar afectando psicológicamente a cualquier persona, se percate o no de ello. Por eso, la importancia de los psicólogos es evidente.

Y es que, como ya se decía, a lo largo de la vida se va aprendiendo prácticamente de todo, pero poco o nada se tiene en cuenta el factor psicológico, lidiar con problemas, preocupaciones y afecciones como el estrés o la ansiedad -incluso los miedos y las fobias-, traduciéndose muchas veces en problemas de salud más graves, en falta de autoestima, en déficit de confianza para intentar hacer algunas cosas, por lo que el factor psicológico acaba siendo igual o más importante que todo, ya que desarrollar la inteligencia emocional, es la mejor manera de lidiar con los problemas, que a fin de cuentas seguirán sucediendo.

Psicólogos especialistas, una necesidad

Todo lo anterior puede servir como introducción para hablar de algo que resulta interesante: la mayoría de las personas se prepara de manera envidiable para su profesión, para su familia, para encajar en la sociedad de una u otra manera, pero no siempre se prepara para tener una inteligencia emocional que le permita afrontar todos los problemas que surjan. De hecho, pocas personas tendrán todas las herramientas para hacerlo.

Contar con psicólogos especialistas como Marian Batle, que tiene una trayectoria medida en décadas de progresos, estudios y excelentes resultados con pacientes en Palma de Mallorca, pero también en el resto de España, puede ser una necesidad imperiosa ante una realidad de vida en la que todos los días están cargados de situaciones que necesitan solución, pasando siempre por la toma de decisiones, por superar retos, miedos, traumas inclusive, por lo que tener las herramientas adecuadas es imprescindible.

Y está demostrado que ninguna persona sabe lidiar sola con todos los problemas. Intentar hacerlo, además, sería un error con resultados totalmente contraproducentes. En cambio, solicitar ayuda profesional cuando se evidencia que la situación se puede escapar de las manos y del control, es una demostración de madurez, pero más aún de querer reencontrarse con la mejor versión de uno mismo.

Principales razones por las que la psicología es esencial en la vida

Superar traumas y miedos del pasado

La palabra trauma proviene del idioma griego clásico y hace referencia a heridas, por lo que en el campo de la psicología, se suele denominar así a las “heridas mentales”, heridas psicológicas que pueden ser recuerdos vividos de un pasado tortuoso, de situaciones que no han podido superarse por ser muy abruptas, tristes y complejas.

Para nadie es un secreto que superar episodios traumáticos puede llegar a ser imposible y el hecho de intentar hacerlo solo conlleva a que los problemas se acrecienten. En cambio, un psicólogo experto, como el caso citado antes, podría utilizar técnicas como el EMDR, cuya eficacia en la superación de grandes situaciones negativas está más que probada. Superar un duelo, una ruptura, un cambio de vida de mayor a menor -en calidad-, miedos del pasado, recuerdos de un robo, por ejemplo, es la única manera de poder vivir con tranquilidad y con el máximo potencial en el futuro.

Orientar la personalidad y las capacidades

La sociedad actual está marcada por la disponibilidad de miles de cosas a la vez. No en vano, se ha popularizado el término de la “economía de la atención”, ya que muchas cosas, actividades, notificaciones, se pelean por captar el enfoque de las personas.

Por eso, orientar las capacidades, enfocarse en objetivos y tener una personalidad auténtica es la única manera, a veces, de conseguir grandes objetivos vitales, pero no es sencillo.

Pero la situación es todavía más difícil cuando se tienen problemas, como las altas capacidades adultos, que en realidad no deberían ser problema, -ya que se hace referencia a personas cuyo Coeficiente Intelectual es igual o superior a 120-, pero suelen ser personas que por su propia condición de inteligencia están interesados en otras cosas, están habituados a formas particulares de relacionarse, pero que por lo general, la sociedad no acepta o directamente les rechaza. De tal manera que los problemas de conducta y la desorientación en cuanto a personalidad, capacidades, enfoque e inspiración, son un problema en este grupo de personas.

De nuevo, el papel de un psicólogo especialista es evidente, porque resulta que son los mejores psicólogos los que deben encargarse de hacer las evaluaciones preliminares para demostrar que una persona puede estar en el grupo de altas capacidades, lo que a su vez, se recomienda hacer desde que los niños son jóvenes, porque permitirá a los padres tener mejores herramientas para afrontar esta situación, que como se ha dicho antes, es única y si bien es una ventaja en toda regla, lograr hacer destacar esas cualidades puede llegar a ser complicado para todos ellos.

Afrontar problemas de la vida

Los problemas de la mente, tarde o temprano acaban por afectar al cuerpo, y viceversa. Pero en realidad, la vida misma invita al estrés, al insomnio, a los problemas de comunicación con la pareja, de convivencia con la familia, de no poder controlar algunas situaciones con los hijos. Lo peor del caso es que no se pueda contar con todas las herramientas para proceder de una manera adecuada y que genere un progreso.

Pero los psicólogos, en ese caso, sí tienen mucho que aportar. En el caso particular de Marian Batle, en Palma de Mallorca, métodos como la Terapia Breve Estratégica, el mindfulness o la terapia cognitivo-conductual, han demostrado ayudar a las personas a solucionar sus problemas, incluso con un protagonismo absoluto de los pacientes, en menor tiempo del que hubiesen pensado, y lo mejor de todo, brindando herramientas para lidiar con problemas similares si se vuelven a presentar. De esta manera, la confianza, la productividad, la autoestima, pero sobre todo la felicidad y la tranquilidad, son las consecuencias, que a su vez son razones de peso para contar con psicólogos de calidad.

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